A sus 79 años de edad, Luis Mendoza, mejor conocido como “Mendocita” falleció dejando un legado eterno como uno de los mejores jugadores venezolanos de todos los tiempos.
Su carácter, tanto dentro como fuera de la cancha siempre lo marcó cómo un jugador polémico, directo, así también fue cuando le tocó trabajar en radio como comentarista y que decir como entrenador, por eso, el fallecimiento de Luis Mendoza, conocido como “Mendocita” siempre será recordado por el eterno 10 criollo.
Nació el 21 de junio de 1945 en la capital venezolana y en la misma ciudad, conocida como la “sucursal del cielo”, falleciera un 29 de abril del año en curso, dejando un vacío notable y que de haber nacido y jugado en otra época, hubiese sido un jugador invaluable.
Su camino con el balón
Destinado a ser un crack de excepción, éste jugador considerado el mejor de todos los tiempos, inicio su andar en el Dos Caminos SC-al este de Caracas- dónde comenzó a dar sus primeras pincelas con el balón, pero a los 10 años de edad, se fue a vivir a Italia en compañía de sus padres, situación ésta que marcaría para siempre, tanto en su personalidad como en su juego.
Pero no pasó mucho para su regreso a la patria, tenía ya con 16 años de edad, cuando debutó como profesional en el Banco Agrícola y Pecuario, donde el charrúa Clemente “El Indio” Ortega fuera su primer entrenador-según datos del comunicador Jesús García Regalado, reflejados en el portal balonazos.com
Un total de 8 encuentros disputó en su campeonato de estreno y marcó 3 goles. Ese mismo año el “Indio” Ortega lo lleva al equipo Universidad Católica que debutaba en la Copa Caracas y ve acción en 5 encuentros. Al siguiente pasó a jugar con el Dos Caminos en la Liga Mayor de 1962. En esta temporada participó en 11 encuentros y anotó 4 goles.
Luis Mendoza con la casaca «vinotinto«
Aunque para la época no se le conocía como la “Vinotinto”, sino como la “cenicienta”, fue un jugador activo en la Selección Nacional debutando con 16 años en los Bolivarianos de Barranquilla, Colombia en 1961 donde logró la Medalla de Bronce dirigido por el argentino Rafael Franco.
En 1964 disputó el sudamericano juvenil en Colombia, donde participó en 5 compromisos. En el año 1965 de nuevo asiste a los Bolivarianos, ahora en Quito, Ecuador y se queda con la Medalla de Plata, disputando 6 partidos, en ambas competencias con Franco como técnico.
Su primera Eliminatoria Mundial la disputó en el año 1965 ante los seleccionados de Perú y Uruguay, participando en apenas 2. En 1967 asistió a la Copa América de Uruguay sumando 5 encuentros y anotó su primer gol con la Vinotinto.
En 1972 asistió a la Copa Centenario de la Independencia de Brasil con Gregorio “Pescaito” Gómez como técnico. Vuelve a disputar la Copa América en 1975 con Walter “Cata” Roque como técnico y en 1979 se despidió como jugador de la Vinotinto con la Copa disputada ante Chile y Colombia con José “Pepito” Hernández.
Un solo título como entrenador
Su paso como entrenador tiene poco registros, un solo título consiguió “Mendocita” y fue con Mineros de Guayana en 1982, donde los negriazules debutaban en la Segunda División y defendiendo el “criollismo” lo título campeón, consiguiendo su ascenso a la Primera División.
En 1983 se marchó a Italia a estudiar en la escuela de entrenadores de Coverciano donde se gradúa junto a figuras de la selección italiana como Fabio Capello y con instructores como Enzo Bearzot y Giovanni Trapattoni. En 1985 regresó al país y es llamado por Cata Roque para incorporarse a la Vinotinto en la eliminatoria al Mundial de México 86. Finalizada la competencia, se hace cargo del Atlético San Cristóbal.
Al siguiente se incorporó al Caracas FC como asistente de Plasencia. Por diferencias con la directiva abandonó el equipo. En 1989 dirigió la Vinotinto en varios amistosos hasta que fue sustituido por Carlos Horacio Moreno.
En la temporada 1988/89 dirigió al Deportivo Italia y volvió al Caracas FC en 1992. Tuvo un conflictivo paso por el Deportivo Chacao y luego se marchó por 5 años a Estados Unidos donde dirigió al Stallions. Cerró su carrera con el Monagas SC en primera división.
Luis Mendoza, el “Mendocita” del país futbolero será siempre recordado, será eternamente el 10 criollo. Qué en paz descanse- @igarcia100